Pero entonces, al volver
de Hamburgo, le pidió a la madre de Stu la bufanda de los años en
la escuela de arte. Los hombre duros nunca caían en nostalgias ni en
melancolías. Pero los hombres duros también tenían derecho a
sentir que el mundo podía resquebrajarse y que no siempre los
botines de cuero ni las guitarras eléctricas estarían ahí para
sostenerlos. La bufanda que Stu, en los años de la escuela de arte,
utilizaba para protegerse del invierno de Liverpool. Y volver a ella como forma de detener el tiempo o como forma de que el tiempo no modificara el recuerdo de Stu para dejarlo en una niebla de humo o en un sueño imposible.
jdlc, 9 octubre 2016
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